martes, 31 de enero de 2017

Bailando despellejados

Y veo a esos reyes de la hipocresía,
Esos cadáveres ambulantes cargando con vivos asesinados
Destinados a ser olvidados
En cunetas de oro y sal
Putrefactos y con más aliento que sus asesinos

Veo los cuerpos bamboleantes de valientes
Que eligieron la lucha del hombre muerto
Y pelearon con las manos abiertas
Sin ocultar sus palmas de idealistas
Haciendo del silencio argumento definitivo
Y de los labios cosidos con aguja de hueso
Evidencia inapelable de su batalla perdida ahora
Y ganada en el infinito

Y veo la guerra entre los que quieren
Y los que quieren que no quieran
Degradándose en átomos de odio,
Moléculas de intolerancia
Los cuerpos de hombres felices
En tumbas anónimas y compartidas
Tiemblan al ver a sus hijos
Matar al sueño de sus padres
Para disfrazarse con su piel


lunes, 30 de enero de 2017

Progenitores de la mierda

Y he visto la lluvia caer, un día tras otro
Sobre las manos encallecidas de un anciano
Que confunde el frío con el hogar
Porque ha sido su única casa por largo
tiempo

Y he visto llorar a hombres adultos
Y afrontar insensibles el dolor a recién nacidos
En un portal destartalado, bajo ángeles de neón
He visto familias completas, y en mansiones doradas
Las he visto rotas, agrietadas como manos cansadas de sufrir

He visto risa y esperanza en la miseria que creamos
He visto plantas crecer en vertederos
Y secuoyas caer presa de parásitos en bosques de fantasía
He visto a los desechados desechar nuestros desechos
Por verlos reflejo de la mierda en que vivimos

He visto más verdad en un padre viejo
Llorando ante su hijo, padre joven
Que en torres de cristales y granito
Ancladas por los huesos de otros padres
Que fueron padres viejos, padres nuevos
Y ahora sólo padres de más huesos




Carbón y yo

Y amé, lo sé, en silencio
Amé tanto, o tan poco
Que se me hizo imposible de medir

Te quise de la única forma que sabía
Sin palabras, atenuando mi persona
En tu presencia
Te amé cerrando los ojos al verte entrar
Y dando un paso atrás al recordarte
Te quise negándome tu amor
Y negándome a mí mismo

Atrapé mis sentimientos de maldito racional
En una bola de vergüenza e ignorancia
Te quise intentando no quererte
Y se me hizo imposible
Te amé como la palabra a la piel
Como la duda al silencio
Te vi perderte entre la bruma
Y volver acompañada

No lloré, porque llorar se llora por pérdidas
Nunca te di por perdida,
El que no se encontraba era yo
Y me quemé en tu ausencia
En los ratos posibles de ser yo mejor
Quemé hasta mi última fibra
Y ardí en el silencio del cobarde
Rodeado por mí mismo, sin lágrimas
Ni segundos pensamientos, sin compasión
Por mí mismo ni por nadie

Te olvidé,
Te guardé en el sótano de mi casa quemada
Con una señal de: "No pasar, Recuerdo Potencialmente Peligroso"
Y entre vigas calcinadas te sepulté
Mea culpa, mea culpa, mea culpa
Me sumergí en un lago de mentiras
Y distracciones, de escusas para huir
Pero de vez en cuando salía a respirar
Y veía las ruinas aún calientes en la colina

Se me escapó el tiempo de entre las manos
El lago se secó, la señal quedó carcomida
Y me desperté un noche entre fangos
Rodeado por peces muertos y recuerdos vivos
Ahí estabas, en la montaña, abrazada
Por tí misma y nada más, pura
Pura tú, me recordaste, que hay sueños
Que no mueren por anoxia, que sólo crecen
Si los dejas abandonados en un lado

Y te veo, y te quiero, y no dejaré
Que yo me interponga en mi camino
He venido a llamarte, a enredarte conmigo
En un trabalenguas impronunciable
En un secreto compartido a voces
Estoy cansado de ser yo, la noche
Se ha hecho palabra y me recuerda:
El despido hecho saludo
La lágrima helada en su mejilla
Un amante sin voz











domingo, 29 de enero de 2017

No

No
Resuena a través de los siglos
A través de millones de kilómetros
Y de culturas irreconocibles

No
Un grito de impotencia contra la crueldad
Negando la locura del hombre
No quiero, no acepto, rechazo
Más allá de tu violencia, de tu odio
Te digo que no, que hoy no decides tú sobre mí
Hoy no gana tu grito a mis labios sellados
Privados de nosotros mismos, sólo nos queda el no

En un universo  incomprensible
Veo el llanto del alma que llora
Veo el grito desgarrado de la injusticia
Veo la voluntad machacada diciendo que no
Que hoy no os imponéis sobre nosotros

No nos queda nada, sólo decir que no
Somos carcasas animadas con un único objetivo:
Enseñaros que no se puede robar todo
La marioneta se rebela, y su rebelión resuena
A través de las edades del hombre
Hoy no se impondrá tu voluntad, hoy no

La cáscara restalla y enarbola la negación
Ni en pobreza absoluta nos quitasteis el rechazo
Sentado en la noche me llegan los ecos
De quienes hicieron uso del no
Porque no tenían otra cosa
Resonaron en las fibras de la historia
Esos únicos noes, nos trajeron hasta aquí
Y nos siguen guiando hacia el futuro

El no nos hizo humanos, el no nos hizo libres
Y ante todo, el no nos advierte

De los pasos que lo hicieron necesario

Camino en silencio, camino de nada

No hay mentira en tu silencio
En tus ojos que miran sin ver
No hay engaño, pero rezo
Por una palabra tuya, por saber

Miente, grita, sé cruel
O simplemente dime la verdad
Cualquier cosa, menos seguir
En el limbo de tus labios reposados

Dime, habla, clamo al cielo
Por ver un movimiento en tus pupilas
No hay emoción que valga
En el rostro que perfilas

Sé que la verdad duele
Y que la mentira es un opiáceo
Pero prefiero el dolor y el humo
A la ignorancia en que me tienes

No soy un paladín de la palabra
Ni poseo un pensamiento arrojadizo
Hablar primero es correr en melaza
Y mi ingenio es animal asustadizo

Advierto a la estatua de su mente
Que la mía es de silencio y de vergüenza
Que la noche cae, se alza nuevamente
Conmigo un centímetro adelante

Retrasado por cadenas autoimpuestas
Camino hacia una piedra pulida
Por la senda de palabras silenciadas

Y ojalá sea una senda compartida

sábado, 28 de enero de 2017

Primer

Hoy son muchos primeres:

Varios de ellos son personales y no vienen a cuento, pero uno es fundamental.

Hoy es la primera entrada de mi primer blog. Será la primera vez que publique algo de forma mínimamente seria y seré el primero en arrepentirme de haberlo hecho.

Como podréis comprobar; no mentía, son muchos primeres.

Tengo la hasta ahora tenaz intención de publicar aquí mi obra poética de forma mínimamente constante. No sé si es buena, no sé si merece la pena, me declaro ignorante. Hasta ahora todo mi feedback han sido familiares bienintencionados incapaces de criticar y amigos con balones por cabeza incapaces de atender, así que necesitaré de vosotros como críticos objetivos entre comillas, no olvidemos que estamos en internet.

Mañana publicaré un par de poemas, e intentaré hacerlo de forma regular hasta que decida tirar este sitio por la borda.

Veamos hasta cuanto dura este fracaso sin hacerse evidente.

Un placer hablar solo,

Juan Sinmedios